Al abrir la sección de noticias de un periódico y leer palabras como “tejido productivo” y “balanza comercial” puede venirnos a la mente una fábrica. Decenas de personas colocadas a lo largo de una cadena de montaje, afanadas en ir dando forma a un producto. Pero existen otro tipo de industrias. Muy pocas. Estas excepciones se centran en producir algo tan intangible como la felicidad. Y en Toledo está una de las pocas que existen en España, La Fábrica de Valores, que a través del baloncesto educa a los jóvenes en respeto, igualdad, compañerismo, gestión emocional…

Khanimambo ha tenido la fortuna de aliarse con ella, firmando un curioso acuerdo comercial que permitirá exportar e importar directamente entre Praia de Xai-Xai y Castilla La Mancha un buen arsenal de sonrisas. Y el primer cargamento llegó el viernes 14 de diciembre: los jóvenes de este club organizaron un evento para recaudar fondos para Khanimambo y nos hemos quedado de piedra con el resultado. Además de una jornada divertida y festiva para todos los participantes, consiguieron sumar la friolera de 1816.61 euros.

 

Un sponsor para tus canastas

El evento se celebró en el centro logístico de La Fábrica de Valores, es decir, en la antigua fábrica de armas de Toledo, hoy campus de la Universidad de Castilla La Mancha. Ni presentaciones ni discursos con infinidad de “ilustrísimos” y “excelentísimos” … ¡directos a la canasta!

Empezaron con tiros libres al aro, una actividad a la que bautizaron como “Una canasta, una sonrisa». Lo original de esta iniciativa fue que cada niño y niña buscaba uno o varios sponsors para sus canastas. Acordado previamente una cantidad en euros por acierto, los más pequeños, bien custodiados por los más mayores, tenían hasta 17 tiros para encestar y conseguir de esta forma fondos para que sus compañeros de Mozambique puedan también practicar deporte.

Después tocó coger fuerzas con una merienda estupenda y curiosear un poco por el mercadillo solidario. Manualidades, pulseras, bolsos… por supuesto en una mesa aparte para que no se manchase con los bizcochos, chocolate caliente, tartas, empanadas y tortilla que servían. Aquí nos gustaría agradecer a todas las familias, comercios y otras fundaciones como APACE que han dedicado su tiempo a impulsar la labor de los chicos y chicas de La Fábrica de Valores. Sin ellos, desde luego, la mesa no hubiera sido tan grande y completa.

El bullicio y las risas que destacaban sobre él de vez en cuando eran buena señal: los asistentes se lo estaban pasando de maravilla. ¡Y nosotras también! Ya sólo quedaba el partido: naranjas contra azules, dos equipos mixtos de cadetes cerrarían el evento. ¿Quién ganó? Pues con el buen rollo que había entre los dos equipos se nos pasó mirar el tablero.

No podemos olvidarnos de agradecer a La Caixa, que se apuntó un tanto al donar a través de la Fila O y regaló a los asistentes unas camisetas. Además, mientras recogíamos el material y nos despedíamos de todos, nos dieron una última buena noticia: están recopilando material y equipamiento para nuestros niños y niñas de Khanimambo. El próximo contenedor a Xai-Xai irá bien cargado… pero estar atentos, porque nosotros también tenemos preparado nuestro particular contenedor. El saldo de esta balanza queremos que quede a 0.