La familia es una parte fundamental en el desarrollo de las personas. Trabajando en equipo, creando un ida y vuelta entre Khanimambo y los familiares conseguiremos un futuro digno para niños y niñas.

Este sábado celebramos el primer encuentro de familias del año. El objetivo principal de esta reunión es informar y recordar a las familias para qué estamos aquí́ y cómo trabajamos.

Es muy importante que sepan en qué lugar están sus hijos, cómo actúa el equipo, hasta donde llega nuestra responsabilidad y cuándo empieza la suya, o sea que sepan también que esperamos de ellos.

 

Compromiso, lealtad, acompañamiento, responsabilidad y respeto hacia los niños y niñas como individuos pensantes y libres, hacia los educadores y trabajadores de Khanimambo, etc.

 

Es importante también escuchar y observar como padres todo aquello que tenga que ver con nuestros hijos. La asistencia es obligatoria, vulgarmente decimos que es su forma de pagar los servicios que ofrecemos, pero en realidad va mucho más allá, porque ellos son los primeros beneficiados de asistir a estas reuniones.

El equipo brilló, cada trabajador y trabajadora tuvo su momento de gloria para explicar muy bien en qué consiste el trabajo de cada uno, cual es la función que cumple en el Centro Munti y padres y madres agradecieron mucho estas intervenciones.

Los Talentos del Centro Munti estuvieron presentes y sorprendimos con una danza, con una demostración de karate y con una nueva canción a cargo del Coro de Khanimambo. Las activistas también bailaron como señal de agradecimiento.

La participación de los padres y la interacción entre la comunidad de hombres y Khanimambo es algo que nos ha costado mucho conseguir. Por eso de que, siguiendo las cuestiones culturales locales, las madres solían y suelen ser las responsables de la familia mientras los padres se ocupan de “otros asuntos” o lo que quiera decir esto: o sea, generalizando, de casi nada.

Para estar en Khanimambo el compromiso debe ser total, completo, padres y madres juntos, por eso insistimos tanto en que la presencia de toda la familia (cuando la hay) es obligatoria.

Ya llevamos varios años trabajando con las activistas, tres madres que hacen de puente entre la comunidad y la Khanimambo. Pero faltaba la participación masculina en ese aspecto también, así que este año recibimos a dos padres que se han comprometido a liderar y crear conciencia sobre todo lo que tenga que ver con sus hijos ya que no son solo responsabilidad de las madres.

En esas estamos, un gran paso contar con estos dos hombres en el equipo y confiamos que con su trabajo consigan implicar al resto de padres en la educación, la nutrición y la salud se sus hijas e hijos.

Familia Khanimambo, ¡¡¡unida para siempre!!!