Después de un año recogiendo material y de un mes esperando que terminara su viaje, el contenedor llega a Xai-Xai con donaciones de todo tipo: ropa, calzado, material escolar, material de comedor y cocina, material informático, material de higiene y sanitario, sillas de ruedas, etc. Es impresionante la alegría con la que recibimos todo esto
Ariadna Ruiz es alumna del ciclo superior de Artes Gráficas del centro Ciudad del Aprendiz. Ella ha sido alumna de Esther, quien les hizo el encargo de realizar tres productos gráficos a partir de algunos elementos que identificasen la Fundación Khanimambo para el módulo de Materiales de Producción. Concretamente Ariadna ha diseñado artículos de oficina,
Mirarse al espejo es algo cotidiano que normalmente se lleva a cabo sin poner demasiada atención. La mayoría de las veces no lo hacemos en profundidad y nos limitamos a ver y explorar pequeños detalles superficiales. Aquel granito que asoma, el blanco de los dientes, un mechón de pelo salvaje; en definitiva, lo estético. Pero
[:es]Hace más de 15 años que Roque y yo éramos buenos amigos. Estudiamos juntos en el colegio, vivimos con complicidad nuestra adolescencia y compartimos después de acabar los estudios la pasión por la aventura. El día que murió Roque Bergareche, estaba en una reunión con Julián, Antonio y Beatriz (responsables del área RSC de N+1)
[:es]Cuando entra un nuevo colaborador en Khanimambo, todos saltamos de alegría y agradecimiento. Una persona que se suma a tantas que ya ayudamos a estos niños y a sus familias a vivir mejor y a tener más oportunidades en la vida. Pero cuando recibimos la tristísima noticia de que una de estas personas se ha
[:es]Nuestro amigo Sergio ha estado con nosotros en Xai-Xai durante el curso de verano y además de trabajar y pasarlo bien con todos nosotr@s ha estado escribiendo su experiencia con Khanimambo en este Blog. Os animamos a seguirle en su vuelta al mundo. Mientras tanto os dejamos con esta entrada suya que nos ha llegado al
Entrada escrita por Sergio Martínez-Burgos Colaboro con Khanimambo desde 2008. Les apoyo porque, como vosotros, pienso que su misión es de las que, por muchos motivos, sencillamente merecen la pena. En su día convencí a mis padres, a mi hermana, a mis primos... para que también participasen, apadrinando a un niño. Pero la verdad es
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