Tía Josina, una chica de 23 años que estudia Nutrición y Salud en el Instituto Politécnico de Tecnología y Emprendimiento de Maputo, es la primera voluntaria mozambiqueña que recibimos por dos meses, en el sentido que nos ha encontrado ella solita, nos ha escrito y nos ha solicitado hacer un voluntariado. Ha venido a hacer las prácticas de sus estudios en el Centro Munti por iniciativa propia. Deseamos que vengan más voluntarios y voluntarias nacionales porque nos encanta contar con el talento local, da mucho sentido al trabajo que hacemos y, sin duda, Tía Josina ya se ha convertido en una referencia para nuestros ahijadas y ahijados que ven en ella un horizonte de posibilidades: mujer, estudiante, con autonomía…

Tía Sandra, la secretaria de Salud, y Tía Guida, la de Nutrición, están contentas con su apoyo en la Campaña de Bajo Peso. Aunque los niños y niñas reciben dos comidas diarias en Khanimambo, algunas veces nos encontramos con un peso por debajo de la media indicada por la OMS. Por eso creamos esta campaña que consiste en ofrecer un suplemento y un acompañamiento en la alimentación de niñas y niños con una sopa a base de verduras y un ingrediente estrella: el cacahuete, que gracias a su gran aporte calórico les llena de energía y nutrientes.

¿A ver, si todo el mundo se toma su sopa?

A través de los años hemos aprendido que un bajo peso suele ir acompañado de una historia de vida complicada y normalmente lo vemos en aquellos niños y niñas más vulnerables con una base familiar desestructurada. Por eso el acompañamiento no termina en Khanimambo, ya que cada niño y niña que está dentro del programa se lleva a casa una porción de sopa, además de la que toma en el Centro Munti. Tía Josina ha empezado una campaña de visitas por todas las casas de la comunidad para hablar con las familias sobre la importancia de una buena alimentación reforzando la idea de que la atención y el cariño también son importantes para combatir la desnutrición infantil.

Otra vertiente importante de la Campaña de Bajo Peso son los tutores. Cada tutor (todos los trabajadores somos tutores en Khanimambo) está a cargo de 17 alumnos y si alguno de ellos está en la campaña, recibe especial atención por su parte. Realizan visitas en casa y están pendientes de que se tomen la sopa cada día. Los niños y niñas, con la ayuda de Tía Josina, han escrito cartas de agradecimiento a sus tutores porque dar valor a los avances y a la subida de peso de alguno de ellos es algo muy positivo.

Cartas para los tutores!