Todo en la testa
Andar por los caminos de arena de Praia de Xai-Xai cansa. Sobre todo cuando vas cuesta arriba. Los pies se hunden y si hay mucha inclinación retrocedes hacia atrás. Solamente cuando llueve es cuando consigues andar sobre un suelo más duro. Pero lo dicho, llueve, y como dispones de pocas mudas de ropa, el placer